EMBARAZADAS E INSECTICIDAS

Según estadísticas, un elevado porcentaje de futuras madres utilizan insecticidas o similares a diario, bien sea en spray o mediante dispositivos eléctricos, a pesar de la peligrosidad que ello supone.

Según estudios realizados por el Centro Superior de Investigación en Salud Pública (CSISP) de Valencia “Las exposiciones durante el embarazo o la infancia se han relacionado negativamente con el crecimiento fetal y efectos neurológicos, así como con una mayor incidencia de la leucemia infantil”.

Las vías de entrada al organismo son:

  • La vía respiratoria, a través de la nariz
  • La vía digestiva, a través de ingestiones involuntarias por la boca, probablemente por falta de higiene, tras manipular envases o pastillas de recambio de los depósitos eléctricos
  • La vía dérmica, por entrar en contacto con superficies previamente rociadas con dichos productos.

Los menores, especialmente los bebés, como pasan mucho tiempo en casa y especialmente en verano debido a las altas temperaturas, suelen llevar menos ropa, están más expuestos, por la presencia ambiental de polvo contaminado.

Por otro lado, cuando gatean, también están más en contacto, pues los residuos plaguicidas se acumulan especialmente en el suelo, en las plantas, etc.

También desde el Centro Superior de Investigación en Salud Pública (CSISP) de Valencia, apuntan que “los fetos y los niños son especialmente vulnerables a la exposición a plaguicidas debido a que sus mecanismos de decodificación no están totalmente desarrollados y a su inmadurez inmunológica”.

http://www.prevention-world.com/es/informacion-tecnica/reportajes-entrevistas/54-embarazadas-usa-insecticidas-nocivos-feto.html

 

Lara Asensio.